¿Quieres un buen logotipo? Responde estas 7 preguntas

Un logotipo es la carta de presentación de tu marca, una primera impresión para tus usuarios. Hay miles de logos compitiendo en tu sector. ¿Cómo destacar entre tanta competencia? ¿Qué identidad visual encajaría mejor con tu empresa? ¿Cómo debería ser tu logo para transmitir correctamente los valores de tu marca? A continuación, repasamos 7 preguntas que los diseñadores hacemos a nuestros clientes antes de diseñar su logotipo.

1. ¿Cuál es la personalidad de tu marca?

¿Qué valores pretende transmitir? Antes de elegir tipografía, color y forma, necesitas conocer en profundidad la personalidad de tu marca. Cada elemento transmite visualmente unas emociones que debes conocer. Por ejemplo, si tu marca es energética y juvenil, el naranja podría funcionar muy bien; si es un producto de lujo, el negro siempre es un color asociado a gama premium y elegancia.

2. ¿A quién va dirigido?

Nunca pierdas de vista a tu público objetivo. El diseño debe estar centrado en tu usuario. Qué personas son las que quieres que te recuerden. Tu audiencia confiará en ti si se siente reflejada.

3. ¿Sobre qué piezas se aplicará tu logo principalmente?

Si tu producto es digital, el icono cobrará especial importancia para funcionar en redes sociales, web, banners…Si la pieza más importante es un producto físico, entonces el material sobre el que se implementará será decisivo para determinar si es un buen logo.

4. ¿Cómo son los logos de la competencia?

Antes de desarrollar tu identidad, hay que hacer un proceso de benchmarking para analizar a tus competidores. Además de darte una perspectiva de lo que funciona bien en el mercado, te aportará ideas para diferenciarte.

5. ¿Qué historia cuenta tu logo?

Un logo no debe ser un ornamento sin más. Un logo sólido es aquel que se justifica con argumentos. El storytelling es la mejor técnica para conectar con tu audiencia, a nuestro cerebro le encantan las buenas historias.

6. ¿Qué imágenes asocias con tu marca?

Las reuniones pueden resultar insuficientes para alinear a diseñadores con clientes y viceversa. Como una imagen vale más que mil palabras, los mood boards sirven como una herramienta visual dirigida a ajustar bien la puntería. Un mood board es un tablero sobre el que compartir imágenes, tipografías, formas, colores y todo aquello que pueda ayudar transmitir la esencia de la marca. El mood board se convierte en un medio de comunicación de ideas entre diseñadores y clientes.

7. ¿Es un logo difícil de recordar?

En un mercado saturado de marcas, el objetivo es conseguir que tu logo sea recordado por la audiencia. Cuanto más simple y sólido sea un logo, más memorable. Es importante que el logo funcione en blanco y negro para asegurar su correcta aplicación sobre cualquier fondo o superficie, que funcione en sus versiones más reducidas y que el isotipo quede bien integrado.

Tras crear un logotipo, hay que desarrollar el resto del material de branding que completa la identidad corporativa: paleta de colores, tipografías, composiciones, estilo de las imágenes, sistema de iconos, aplicaciones de logotipo en diferentes piezas, etc. En definitiva, el logotipo es el buque insignia de una identidad de marca, pero no hay que olvidarse de todo el universo visual que lo rodea.