Una agencia para optimistas comprometidos
En 1993 Materiagris inició su andadura. Por aquel entonces los Macs empezaban a aterrizar en las agencias y Google aún no existía. La publicidad de calidad estaba reservada a las grandes multinacionales y el único objetivo era vender, vender y vender. Nos curtimos creando campañas, en un mundo industrial, para sectores como gran consumo, alimentación, entretenimiento o distribución. Salvo dificultades puntuales eran “días de vino y rosas”, y los presupuestos parecían resistir cualquier contratiempo. Todo era más fácil.
Han pasado casi veinte años y muchas cosas han cambiado. Los efectos de la especulación inmobiliaria, la corrupción política y la avaricia de los banqueros nos han llevado, con el silencio de una inmensa mayoría, a un mundo marchito e indecente. Nosotros nos resistimos a ver esta situación como inevitable y creemos que estamos a las puertas de un gran cambio de paradigma. En Materiagris no vemos la publicidad como una herramienta al servicio de esta sociedad de consumo, insolidaria y vacía. Creemos firmemente que la publicidad es un poderoso motor de cambio y que puede contribuir a provocar las transformaciones que nuestro mundo necesita para ser más justo, pacífico y sostenible. Cada vez son más las personas que creen que otro mundo es posible, que no se rinden y que ven oportunidades donde otros ven excusas. Nosotros los llamamos “optimistas comprometidos” y por suerte cada vez nos encontramos más por nuestro camino. Nosotros queremos dedicar nuestra creatividad y experiencia a apoyar a estas personas para que pongan en marcha sus proyectos y sus ideas.
Agencia de publicidad para empresas y organizaciones con impacto social